Las puertas son uno de los elementos que más se ensucian en una casa.
Esto se debe a que todos los miembros de la familia las tocamos al entrar o salir de una habitación.
También suelen acumular polvo y suciedad del ambiente. Por eso, el mantenimiento regular es indispensable para alargar el tiempo de vida útil de tus puertas y al mismo tiempo proteger a tu familia de los gérmenes.
Si no sabes cómo hacerlo o temes dañar ciertas superficies, este artículo te resultará útil. Aquí te enseñaré qué debes hacer para limpiar puertas y dejarlas impecables.
¿Qué necesitas para limpiar puertas?
A continuación, te dejo una lista con 4 herramientas que no te deben faltar al limpiar tus puertas.
Aspiradora
Para lograr una limpieza rápida y eficaz necesitas una aspiradora potente. Con estos equipos podrás eliminar hasta la suciedad más escondida a donde no llega tu mano.
Por su portabilidad y ligereza las aspiradoras de mano son la mejor opción para este trabajo.
Agua tibia y jabón
En ocasiones las puertas tienen manchas o suciedad pegada. Para estos casos es indispensable lavar la superficie con una solución jabonosa y agua tibia.
Evita utilizar químicos abrasivos pues podrían deteriorar la superficie
Esponjas suaves
Utiliza una esponja suave y frótala sobre la toda la superficie de la puerta. Al finalizar pasa un paño seco para eliminar toda la humedad.
Evita las esponjas ásperas o de alambre ya que rayarán las superficies y arruinarán el acabado de la puerta.
Desinfectante especial para manillas
Las manillas y picaportes son las piezas de la puerta que más tocas. Por lo tanto, están más expuestos a contaminarse con virus y bacterias. Desinfecta estas áreas con un producto certificado.
Estos limpiadores los puedes conseguir en cualquier supermercado o tienda que ofrezca productos para el hogar. También puedes utilizar jabón líquido para este trabajo.
¿Cómo limpiar puertas de madera?
Aunque no lo parezca, las puertas de madera acumulan mucha suciedad. Si no se limpian de forma periódica, las impurezas podrían adherirse a la superficie de tal manera, que sería casi imposible quitarlas.
Para evitar dañar tu puerta, antes de limpiarla debes tomar en cuenta el tipo de madera y la clase de acabado que tiene. Para ello, sigue estas recomendaciones:
Limpieza superficial
El polvo y el contacto frecuente es lo que más ensucia las puertas de madera. Como consecuencia, poco a poco pierden el brillo.
La solución es limpiar una vez por semana estas superficies. Puedes usar un aspirador para quitar de forma rápida todo el polvo o tela de arañas presentes.
Manchas y rayones
Las manchas más comunes en las puertas de madera son ocasionadas por las huellas y la grasa que proviene de tus manos.
Quitar este tipo de suciedad es sencillo. Solo debes utilizar un producto desengrasante o jabón neutro y una esponja suave que no deje marcas de arañazos.
Para las marcas de lápices o creyones el procedimiento es parecido:
- Disuelve jabón o detergente en un poco de agua caliente.
- Rocía la mezcla sobre las manchas o rayones.
- Friega con suavidad y enjuaga con agua tibia para que el jabón no deje manchas.
Puertas barnizadas
Existen productos de limpieza certificados para la limpieza de superficies barnizadas.
Pero si no cuentas con ninguno de ellos puedes preparar una mezcla casera para sacarle brillo a tu puerta. Estos son los pasos que debes seguir:
Ingredientes:
- 50 ml de aceite vegetal (girasol, palma o soya)
- 50 ml de vinagre
- 250 ml de agua
Elaboración:
- Retira el polvo de la puerta con un aspirador.
- Mezcla todos los ingredientes en un recipiente.
- Humedece un paño limpio en la mezcla y pásalo siguiendo la dirección de las franjas de la madera.
- Deja actuar por 30 minutos y pasa un paño seco para finalizar.
Puertas lacadas
Las puertas lacadas las puedes limpiar con una cera neutra o un producto abrillantador de madera. Antes de hacerlo asegúrate de quitar todo el polvo de la puerta.
Para la suciedad pegada puedes utilizar un poco de amoniaco diluido en agua y fregar todas las áreas con movimientos circulares.
El amoniaco tiene un olor fuerte, así que abre las ventanas por precaución al utilizarlo.
¿Cómo aspirar bien las puertas?
El aspirado de las puertas contribuye a la eliminación de las bacterias y aleja a los insectos y bichos que quieren hacer sus moradas allí.
Si quieres conseguir un aspirado completo sigue estos pasos:
Paso 1. Empieza a pasar la aspiradora por el costado de la puerta de arriba hacia abajo.
Paso 2. Utiliza una escalera para llegar hasta la parte más alta. Una vez allí, aspira también la pared y parte del techo para eliminar telas de araña o cualquier clase de suciedad que pueda volver a ensuciar la puerta.
Paso 3. Si es posible, utiliza un accesorio ideal para ranuras y esquinas para llegar a la suciedad más profunda.
Paso 4. Aspira la parte interior y exterior de la puerta de arriba abajo cuidando que no falte ninguna zona.
Paso 5. Por último, aspira el piso y recoge cualquier resto de polvo que haya caído.
En resumen, no dejes pasar mucho tiempo antes de limpiar tus puertas. Aspira de forma constante y actúa rápido cuando se trate de un rayón o una mancha.
De esta forma, se mantendrán relucientes y como nuevas por más tiempo.
Si quieres mejorar tu rutina de limpieza, te invito a leer esta guía para mantener la casa limpia